(Por Facundo Lancellotta para «Deporte Argentino Plus»; foto: ) 

 

Destacada actuación del equipo integrado por Mateo Díaz, Ezequiel Paz, Pedro Rossi y Tomás Chapero.

Los argentinos comenzaron el torneo venciendo en su primer partido a Estonia por 20-17. 

En el segundo partido los chicos vencieron a Brasil por 14-6 con una defensa de élite, presionando en cada posesión al conjunto carioca.

En el tercer partido los dirigidos por Leo Tesido se impusieron ante el rival más “accesible” del grupo, Kirguistán, por 16-8. Pese a ser superiores en el juego, Argentina no estuvo efectiva en los tiros por lo que el partido se decidió en los últimos minutos. 

El cuarto y último partido del grupo fue el plato fuerte, ante Rumania que llegaba invicta al igual que la albiceleste. Se jugó de igual a igual durante todo el encuentro, pero los argentinos con una volcada y un tiro de tres sellaron el triunfo por 21-17. 

Así los chicos consiguieron el pasaje a cuartos como primeros del grupo. 

 

Allí enfrentaron a Ucrania. En un partido que fue palo y palo, con un cierre de película vencieron por 21-20.

En semifinales esperaba Turquía que venía de derrotar a los anfitriones. Aquí llegó la primera derrota, fue 13-11 a favor de los turcos, que se llevaron el pasaje a la final.

Argentina frente a Rusia definiría el 3er y 4to puesto. Fue 21-18 para los chicos que lograron colgarse la medalla de bronce.

 

Esta es la 4ta medalla que consigue la Argentina en esta competición, tras el oro en 2013 y la plata en 2015. Así como también la medalla de Oro en los Juegos Olímpicos de la Juventud 2018. 

El argentino Mateo Díaz fue el máximo anotador del torneo con 52 puntos, unos 7,4 puntos por juego. 

Argentina finalizó el torneo con un gran record de 6-1.