INTERESANTE DESARROLLO DE LAS PRUEBAS
(Fuente: CADA y World Athletics)
Después de que el turno matutino de este miércoles 4 de agosto tuviera un momento impactante con los 400 metros con vallas femeninos y el récord mundial de la estadounidense Sydney McLaughlin, la jornada nocturna también tuvo varios puntos de emoción.
McLaughlin obtuvo esa especialidad en 51s46, mejorando el récord mundial de 51s90 que habíia logrado hace pocas semanas, y terminando delante de su compatriota Dalilah Muhammad -campeona olímpica de Rio 2016 y campeona mundial- quien ahora también estuvo debajo del tope anterior al registrar 51s48. La holandesa Femke Bolke se llevó la medalla de bronce con 52s03. En esa carrera, la panameñao Gianna Woodruff terminói séptima con 54s22.
Uno de los grandes momentos de la noche fue la victoria del velocista canadiense Andre DeGrasse, quien pudo postergar al trío estadounidense en los 200 metros llanos para conseguir, al fin, su primera medalla de oro en un acontecimiento en este nivel, tras lograr varias medallas en las últimas temporadas. Grasse marcó 19s.62 en la mejor carrera de su vida, dejando en el segundo lugar al estadounidense Kenny Bednarek (19s68), al campeón mundial Noah Lyles (19s74) y a quien, seguramente, será la gran figura en un futuro inmediato: Erriyon Knighton (19s93), quien viene de quebrar el récord mundial u18 de Usain Bolt en esta distancia (lo colocó en 19s84 en las semis de Tokio). También el liberiano Joseph Fahnbulleh, quinto, estuvo por debajo de los 20 segundos al marcar 19s98.
Para De Grasse fue su quinta medalla olímpica y la más relevante, desbordando en los 50 metros finales a sus rivales estadounidenses. «Lo hice. Había esperado tanto tiempo», dijo el sprinter de Ontario, que venía de obtener el bronce en los 100 llanos del domingo. «Mi entrenador me dijo que tengo que ir duro en la curva, tengo que quedarme con Kenny en la curva, él tiene una magnífica curva», dijo De Grasse. “Y una vez que salgas de esa curva, simplemente relájate y fluye, eso es en lo que eres bueno. Intente mantenerse suelto, relajado, siga bombeando. Sigue moviendo mis brazos y termina fuerte «.
Después de cruzar la línea, De Grasse quedó de espaldas en la pista durante mucho tiempo. Se envolvió con la bandera canadiense y besó sus zapatillas. Es el tercer canadiense en ganar los 100 metros olímpicos y el primero desde Percy Williams en 1928.
Hasta el miércoles por la noche, la colección de medallas olímpicas de De Grasse se veía así: 100 m de bronce en Tokio, 200 m de plata en Río, 100 m de bronce en Río, 4×100 m de bronce en relevos en Río. El resumen de los Campeonatos Mundiales de fue similar: 200 m de plata y 100 m de bronce en 2019, 100 m de bronce y 4×100 m de bronce en relevos en 2015. Ahora puede agregar este oro.
Bednarek, de 22 años, mientras tanto, se enorgullecía de ganar la medalla de plata en sus primeros Juegos Olímpicos. “Todo mi arduo trabajo ha valido la pena”, dijo. «Estaba liderando la carrera y esperaba salir con el oro, pero la primera vez que soy un atleta olímpico, la primera vez que corro los 200 metros y la primera vez que obtengo una medalla de plata, estoy contento con mi desempeño».
En los 3.000 metros con obstáculos femeninos, Peruth Chemutai le dio un histórico oro al atletismo de Uganda coin 9m01s45, delante de la estadounidense Coiurtney Frerichson con 9m04s79 y la keniata Hyvin Kyeng con 9m05s39, mientras que la recordwoman mundial -la keniata Beatrice Kepkoech – terminaba séptima con 9m16s.33.
Con 600 m para el final, la estadounidense Frerichs tenía una ventaja útil, pero Chemutai la tiró pacientemente y tomó la delantera con 300 m para el final, alejándose para ganar en un mejor tiempo personal , dándole a Uganda el primer oro femenino de su historia. Frerichs ya había sido medalla de plata en el Mundial de Doha, hace dos años, mientras Kyeng fue campeona mundial 2015 en Beijing y ahora consiguió su tercera medalla olímpica consecutiva.
El canadiense Damian Warner ha tomado una importante ventaja en el decathlon (el recordman mundial, el francés Kevin Mayer está 5° y a unos 400 puntos), mientras que el brasileño Felipe Vinicius dos Santos marcha en el 12° lugar con 4.266 puntos acumulados en este primer día. Sus parciales fueron 10s58, 7.38, 14.13 en bala, 2.02 en alto y 49s.31 en los 400 llanos.
Como aparecía en los pronósticos, Polonia estuvo en el podio del lanzamiento del martillo, aunque el campeón fue Nowicki con 82.52 (y no el múltiple campeón Pawel Fajdek, 81.53). Este, al menos, superó sus frustraciones de los dos Juegos Olímpicos anteriores y llegó al podio, con medalla de bronce. Entre los polacos se ubicó el noruego Eivind Henriksen con 81.58, m. en otra espléndida demostración del gran momento del atletismo de su país. Y en el heptathlon femenino, la colombiana Evelys Aguilar, recordwoman sudamericana, terminó su primera jornada en el 21° puesto con estos parciales: 13s89 en vallas, 1.68 en alto 13.42 en bala y 24s05 en 200 metros.
Damian Warner lidera el decatlón con 4722 puntos del campeón mundial sub-20 de Australia Ash Moloney (4722) y un segundo canadiense Pierce LePage (4529), con el poseedor del récord mundial Kevin Mayer en quinto lugar (4350) y necesitando un gran segundo día. En el heptatlón, la holandesa Anouk Vetter lidera con 3968 puntos los belgas Noor Vidts (3941) y Nafi Thiam (3921), campeona olímpica.
Otra final del día fue la de 800 metros masculinos, donde al fin Kenia consiguió un medalla de oro a través de Emanuel Korir con 1m45s06, concretando el 1-2 con Ferguson Rotich, quien marcó 1m45s.23. El polaco Petryk Dobek se llevó el bronce con 1m45s39. o había un favorito claro para esta final y, en consecuencia, ninguno de los contendientes estaba dispuesto a marcar el ritmo. Fue lento durante la primera vuelta cuando el australiano Peter Bol se vio obligado a ir al frente y se convirtió en el blanco fácil para sus rivales. Korir cambió el ritmo a 200 metros del final. Se trata de un especialista de 400 y 800, y esta carrera jugó perfectamente en sus puntos fuertes.
Su compañero de equipo Ferguson Rotich y el polaco Patryk Dobek respondieron, pero no lo suficientemente rápido, y no tuvieron la velocidad para contener a Korir. Korir cruzó la línea de meta, justo por delante de Rotich (1: 45.23) y Dobek (1: 45.39), con el australiano Bol cuarto (1: 45.92), y el español Ben en un gran quinto puesto. «Esto es algo muy importante para mí después de no poder clasificarme para la final de los Campeonatos del Mundo de 2017 y 2019, pero hoy es mi día», dijo Korir.
En las semifinales de los 400 metros femeninos -que vieron a ocho atletas por debajo de los 50 segundos- terminó el recorrido de la guyanesa Aliyah Abrams, séptima en su serie con 51s.46.
En las semifinales de los1.500 metros femeninos, Sifan Hassan (Holanda) y Faith Kipyegon (Kenia) se llevaron una victoria cada una para mantenerse en el rumbo de un enfrentamiento delicioso el viernes. Kipyegon estuvo impresionante, ganó la primera semifinal en un rápido 3: 56.80, arrastrando a dos de las clasificatorias detrás de ella, Jessica Hull, cuarta clasificada (3: 58.81) y Nozomi Tanaka, quinta, clasificada (3: 59.19), a récords nacionales.
Freweyni Gebreezibeher de Etiopía (3: 57.54) y Gabriela Debues-Stafford de Canadá (3: 58.28) también se clasificaron cómodamente. Hassan, que ya ganó los 5000 m en Tokio y tiene la intención de disputar los 10.000 m el sábado, tomó el enfoque contrario, conservando la mayor cantidad de energía posible antes de acercarse a los líderes de la carrera con 200 m para correr y tomar el control de la carrera, clasificando en 4: 00.23.