Ana Gullay (izq) y Georgina Klug (der) en busca del oro para el Beach Voley

-¿Qué tuvieron junto con Georgina para llegar a ésta instancia?
-Nosotras nos caracterizamos por ser un equipo  que tiene mucha  garra. Cuando nos conectamos las dos podemos ser peligrosas, el problema está cuando nos desconectamos. Depende de nosotras y a veces el otro equipo nos hace jugar mal y perdemos, pero si estamos las dos bien consolidadas podemos hacer mucho daño.

-Ya tienen asegurado un lugar en el podio, ¿cómo es para vos representar a Argentina en un Juego Panamericano?
–Para mí representar al país es un orgullo y cada punto es un orgullo por mi país. Este es mi segundo Juego Panamericano, con Georgina estamos jugando el circuito mundial y podemos jugar de otra manera. Todo esto es gracias al ENARD, al Comité Olímpico Argentino, a la Secretaría de Deportes y a nuestra Federación que son quienes nos ayudan a viajar para que podamos jugar a alto nivel. En el 2012 tuve la suerte de participar en un Juego Olímpico, sabíamos que no  nos iba a ir de maravilla pero así y todo yo sigo entrenando y con esas ganas de ganar.

-¿Cómo ves el crecimiento del Beach Voley en Argentina?
-Yo creo que es un deporte al que hay que darle tiempo. No es como el voley, fútbol o básquet en donde hau clubes en que lo practican. Acá tenes que estar en la Selección para poder jugar. La Secretaría de Deportes está trabjando muy bien en este deporte. Yo amo el Beach Voley y espero que el día en que no juegue más pueda seguir ligada a esto y poder enseñar a otros.