(ENVIADOS ESPECIALES Deporte Argentino Plus y Noti-Amateur ; @deporteargplus ; @AleMolezzi ; fotos: producción Deporte Argentino Plus )

Finalizado el encuentro de handball femenino entre Argentina y Cuba, las jugadoras Rocío Campigli, Marisol Carratú y el entrenador Eduardo Peruchena hablaron con Deporte Argentino Plus y Noti-Amateur.  

Rocío Campigli: «Creo que si bien nosotros tenemos más experiencia y competencia, existió diferencia entre los dos equipos, son muy buenas físicamente, son más rápidas y fuertes, tuvimos algunos errores en la pérdida de pelota, ellas también tuvieron, el partido perfecta no existe, hicimos todo lo que pudimos, todo lo que estuvo a nuestro alcance, jugué casi todo el partido y es difícil estar en la cancha y mantener la intensidad todo el partido. Traté de hacer todo lo que pude. Realmente estoy orgullosa del equipo que tenemos. Trabajamos mucho y es cuestión de seguir trabajando y seguir mejorando». 

Marisol Carratú: «Hicimos todo lo que pudimos, no hay otras palabras, se dio lo que veníamos trabajando, resaltarmos lo que se mejoró que es mucho, lo que está bueno es que nunca dimos por perdido el partido. Estuvimos ahí y no pudimos rematarlo, siempre le dábamos una vida más y ya está. Somos «La Garra», damos pelea y tenemos que reflexionar lo de este partido, pero ya tenemos que seguir adelante para pensar en Chile y ver si después toca Brasil y así. Todavía nada está dicho, hay que esperar y aguantarnos un poquito el sufrimiento, nada más. Duele todo, lo del comienzo del partido y también no poder definirlo al final. Tenemos que analizarlo tranquilas porque ésto nos sirve para crecer, la mayoría somos menores de 30 años salvo las más experimentadas que son las que nos aportan la energía y fuerza y parecen más jóvenes que nosotras y ya tienen mucho roce y saben manejar mucho más las situaciones que el resto, son experiencias que se tienen que vivir y nos cuesta un poco, pero de ésto se aprende y lo que no nos mata, nos fortalece».

Eduardo Peruchena: «El arranque no fue lo que esperábamos, en el cierre no metimos los goles, con gran mérito de la arquera de ellos y poco de falta de precisión nuestra. Duele como todas las derrotas, el torneo sigue y no podemos ponernos a pensar cuánto dolor tenemos, en el final del torneo será tiempo de balances. 

Ahora hay que reflexionar acerca del partido con Cuba y después ponernos a trabajar porque viene el partido con Chile, lo miramos cuando jugaron con Uruguay y después si tenemos la posibilidad de entrar en semi, sería el cruce con Brasil que sabemos el potencial que tienen pero lo último que tenemos que hacer es darnos por vencidos.

En handball femenino imposible no hay nada, hace un año empatamos con Brasil a tres meses que venían de salir campeonas del mundo, es verdad que no sería muy lógico pero tenemos que seguir jugando el torneo y asumir lo que viene, si toca Brasil en semi jugar lo mejor posible y ver si nos toca aprovechar ese mínimo porcentaje que uno siempre tiene, porque esto es un juego.

Creo que la remontada que tuvimos en el primer tiempo del partido con Cuba, habla de un temperamento, de la fortaleza anímica, para remarcar hicimos un buen segundo tiempo pero ellas no decayeron, sostuvieron el ataque y no tuvieron grandes lagunas, salvo algún bache en el primer tiempo mantuvieron el goleo, tienen mucho potencial físico, por eso obligaron a un esfuerzo nuestro en defensa muy grande, quizás nosotros tendríamos que haber podido neutralizar a una o dos jugadoras claves de Cuba por sus lanzamientos externos, no lo logramos del todo».