EL RELEVO MASCULINO 4X100 SE SUBIÓ AL PODIO
(Enviado Especial Alejandro W Molezzi para «Deporte Argentino Plus»; fotos: redes sociales deportistas)
En el Estadio Nacional de Santiago se realizaron las postas 4×100 del atletismo en los Juegos Panamericanos Santiago 2023 y en la que participaron velocistas nacionales en damas y caballeros.
En las posta 4×100 de la rama femenina el equipo conformado por María Florencia Lamboglia-Belén Fritzche-Melanie Rosalez-María Victoria Woodward finalizaron en la segunda ubicación de su serie semifinal con un tiempo de 44:72 (detrás del cuarteto de ecuatorianas con 44.34) y estableciendo un nuevo récord nacional en la especialidad. Ya en el Campeonato Sudamericano de San Pablo 2023 las argentinas habían quedado muy cerca de la marca con 45.14 (en la formación estuvo Sofía Casetta en lugar de Melanie Rosalez). Las velocistas albicelestes batieron una histórica marca de 44:90 que hacía 48 años se mantenía cuando el 20/10/1975 el cuarteto de Belkis Fava-Ángela Godoy-Liliana Rosa Cragno-Beatriz Allocco estableció ese registro.
En esta competencia corresponde comentar que la cordobesa María Victoria Woodward sufrió una caída al momento de cruzar la meta, tuvo un fuerte golpe en su cabeza y uno de sus hombros y debió ser atendida medicamente en la misma pista. Esta situación llevó a que -por protocolo- no pudo formar parte del equipo en la final a la que habían clasificado y por eso es que Argentina no participó en la lucha por las medallas panamericanas.
Por el lado de los caballeros, en la serie semifinal el equipo albiceleste integrado por Tomás Mondino-Juan Ignacio Ciampitti-Bautista Diamante-Franco Florio quedaron segundos con un tiempo de 39:53, detrás de los brasileños (38:84) y se aseguraron un lugar en la final. Este registro alcanzado por los argentinos en semifinales batió la marca nacional de 39.85 que se habían conseguido en 2010 y en julio del 2023.
Posteriormente, ya en la final, el cuarteto estableció una marca de 39:48 volviendo a sellar un nuevo récord en los relevos 4×100 masculinos a nivel nacional que les posibilitó lograr el tercer lugar (primero Brasil, seguido por Cuba) y quedarse con la medalla de Bronce, aprovechando una lesión del cuarto relevo del equipo estadounidense en el tramo final y que le permitió a Florio superarlo y finalizar en el podio. Momento histórico para nuestro atletismo que luego de 72 años consiguió una presea, la anterior había sido el Bronce ganado por Delfo Cabrera en los Juegos Panamericanos Buenos Aires 1951.
