Bárbara Buenahora, la triatleta marplatense habló en Marca Deportiva Radio (FM 99.9) sobre su vuelta a la actividad con un grandes resultados: “No esperaba este nivel tan bueno, pero sé que puedo más”. Además los desafíos de competir siendo madre.

(Gentileza: Rodrigo Divito – Marca Deportiva) 

Ha sido un cierre de 2018 excepcional para la mejor triatleta argentina, la marplatense Bárbara Buenahora. Después de su triunfo en el Triatlón Olímpico Series y siendo la mejor argentina en el Ironman de Mar del Plata, habló en Marca Deportiva Radio (FM 99.9) sobre su auspicioso regreso a la competencia con 41 años y luego de ser madre. 

“Estoy muy motivada y contenta con este regreso”, dijo. Luego abundó: “tengo energía y lo pude trasladar a los resultados. Vamos a estar entrenando en la altura de Cachi Natación, ciclismo y también corriendo para después bajar el Ironman 70.3 en Pucón”; anticipó sobre la tarea que hará en las próximas tres semanas. Para Bárbara no habrá vacaciones, pero sabe que es el momento de iniciar el año. 

“No esperaba encontrarme con el nivel que estoy teniendo ahora, es muy bueno y se que puedo más. Fue muy intensa la temporada y la carrera del domingo no estaba en mis planes, pero no quería dejar a Mar del Plata sin representantes”, agregó sobre su decisión de competir en el Triatlón Olímpico donde obtuvo su primera victoria.

No es fácil dejar una especialidad compleja como el Triatlón para volver luego de ser madre. Sin embargo, la pasión y el desafío fueron más fuertes que la comodidad: “el triatlón es una disciplina que siempre me apasionó, lo tomo como un desafío y una prueba de superación. Con dos hijos hay mamás que me preguntan como hago con la escuela y con los actos, porque todos los días tenemos que entrenar y estar bien para afrontar desafíos”. 

La recompensa se ve cuando compite y tiene a su familia alentándola desde atrás de las vallas: “tiene la emoción de que me vean correr, siempre estamos pensando en eso y nos da una capacidad terrible. El triatlón es muy mental porque programás todo un año de entrenamientos y en la carrera tenés una fuerza especial por ser madre”,puntualizó sobre sus sentimientos en competencia.

EL CUERPO AGUANTA

Estar en el Ironman de Mar del Plata fue uno de sus desafíos más grandes del año y lo superó con éxito: “hace 12 años que no corría un Ironman y los últimos metros fueron muy emocionantes, me largué a llorar antes de llegar. Fue una pelea conmigo misma antes de volver, uno no tiene que dejar de hacer cosas por uno mismo”, remarcó como mensaje de su propia experiencia.  

Estar activa ya es meritorio, pero además siendo protagonista es aún mejor y su cuerpo no parece haber sentido el paso del tiempo: “estoy bastante asombrada con la forma en que pude volver. Pensé que tenía un límite en el cuerpo, pero puedo asegurar que me siento muy bien. El cuerpo tiene mucha memoria y el entrenamiento empieza a ponerte en ritmo. Hay que cuidarse de no entrar en una lesión porque es más difícil recuperarse”, aclaró sobre la vida del triatleta pasando los 40 años. 

¿COMO SOBREVIVE EL TRIATLETA?

Es difícil sobrevivir, mantener una familia, cuando un triatleta no tiene posibilidades de tener un sueldo y mucho menos de costearse los elementos para entrenar. Buenahora remarcó que “el deporte está siendo apoyado por las empresas y por las instituciones. Cuesta y todavía falta mucho. En triatlón necesitamos una tecnología que cuesta mucho tener, hoy en día tengo sponsors pero siempre es un esfuerzo que debemos medir. No lo puedo hacer como quisiera a lo largo del año”. 

La pre-temporada en Cachi le servirá de base para todas las competencias que tiene por delante, porque ya anticipó un 2019 plagado de actividad y con muchas oportunidades de ratificar su gran momento: “tengo muchos objetivos y espero que pueda ir paso a paso. El 13 de enero estaremos en Pucón preparándonos para esta carrera dura. De ahí tendremos Tria Short y Olímpico. El 10 de marzo estaré en Bariloche y luego en Concordia con un medio Ironman, en Miramar me invitaron para correr y después pensaré en el 70.3 de Buenos Aires. Mi idea es bajar el récord que tengo en el Ironman que es de 9 horas 39 minutos”, se planteó como gran objetivo.