Con una ceremonia sencilla y llena de emociones, Tokio 2020 bajó su telón y le pasó la posta a París 2024.
(Fuente: COA; fotos: Getty Images, AFP y Enard)
Al igual que la inauguración, la ceremonia de clausura se realizó en el Estadio Olímpico de Tokio, con un enfoque más simple y moderado, con las delegaciones de los países que participaron, felices con la convicción de haber dado lo mejor y haber cumplido un sueño que, hasta hace apenas unos meses, parecía imposible por la pandemia del Covid-19.
La ejecución del himno nacional dio lugar al izamiento de la bandera de Japón, que fue portada por algunos miembros de la delegación local.
Entonces ingresaron los abanderados de las 205 delegaciones participantes, que se fueron poniendo en círculo en el centro del estadio. El capitán del seleccionado de hockey sobre césped, Pedro Ibarra, portó el pabellón celeste y blanco.
El posterior desfile de los atletas fue animando el campo de juego. Los deportistas e integrantes de las diferentes delegaciones fueron ingresando por las cuatro entradas de acceso ubicadas en las esquinas del estadio, sin un orden establecido, bailando, festejando y celebrando haber cumplido su sueño olímpico.
Como era de esperarse, todos los atletas desfilaron con barbijos y tapabocas, pero esos elementos no pudieron ocultar su felicidad por haber participado en unos Juegos Olímpicos históricos.
Luego comenzó un juego de luces de colores que fue acompañado por los flashes de los celulares. Los fuegos artificiales continuaron y se vio un efecto especial donde en la transmisión se vieron los cinco anillos olímpicos suspendidos en el aire.
El concepto principal de la ceremonia fue ‘Worlds We Share’ (Los mundos que compartimos)», con lo cual el Comité Olímpico Internacional (COI) apuntó a que se abran las puertas a un futuro más alentador en todos los sentidos.
Al igual que el resto de los eventos y actividades en Tokio 2020, la ceremonia de clausura se llevó a cabo sin público en las gradas debido a la pandemia por Covid-19.
Un grupo de músicos japonés y un set de DJs amenizó la velada con música y con un espectáculo artístico, animando a todos los deportistas presentes a unirse y bailar en la celebración.
Como es tradición en cada Ceremonia de Clausura, sonó el himno de Grecia, país donde surgieron los Juegos Olímpicos de la era Moderna, y se izó también la bandera del país heleno.
Posteriormente fueron premiados los medallistas de la maratón masculina y femenina disputadas en Sapporo, como tradicionalmente sucede en las ceremonias de clausura de los Juegos.
También fueron reconocidos los miembros de la Comisión de Atletas del Comité Olímpico Internacional, pero hubo uno especial a los miles de voluntarios de todo el mundo que llegaron a Tokio, agradeciendo su duro trabajo en estos Juegos Olímpicos.
Como parte de la tradición olímpica, se realizó la Ceremonia de Amberes, el paso oficial de la antorcha de la nación anfitriona a la siguiente, que fue celebrado entre Anne Hidalgo, la alcaldesa de París, que albergará los Juegos de 2024, junto al presidente del COI, Thomas Bach, y la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike.
La alcaldesa de París recogió el testigo de Tokio al recibir la bandera con los aros olímpicos a manos de Thomas Bach, mientras que sonaba ‘La Marsellesa’, el himno nacional de Francia, interpretado por su propia orquesta sinfónica.
Un vídeo del recorrido por los tejados de París, la que será nueva sede de los Juegos Olímpicos dentro de tres años, fue el preámbulo de un mensaje de los atletas franceses que han competido en Tokio y que ya están en París, dándole la bienvenida a los que serán sus Juegos.
«Esta noche cae el telón de unos Juegos de superación, y me gustaría expresar mi profunda gratitud a los servicios médicos y a todos los que han contribuido para que Tokio 2020 saliese adelante. Aunque no hubo espectadores, los deportistas han sido recibidos por flores de gloria cultivadas por niños de Japón”, afirmó en parte de su discurso Seiko Hashimoto, presidenta de Tokio 2020.
Por su parte, Bach, aseguró: «El deporte trae fe para el futuro. Los Juegos de Tokio 2020 son los Juegos de la esperanza, la solidaridad y la paz. Ustedes, los mejores del mundo, solo han podido hacer realidad el sueño olímpico porque Japón ha preparado un escenario para brillar, y pueden estar orgullosos. Gracias, Tokio»
«Han sido unos Juegos sin precedentes. Nos ha costado a todos un esfuerzo enorme para hacerlos realidad, y por eso quiero agradecer a todos los niveles de las autoridades japonesas por su firme compromiso», resaltó.
La llama olímpica se fue extinguiendo poco a poco hasta desaparecer, y los fuegos artificiales ponen el broche de cierre a la cita olímpica.
Tokio 2020 tuvo que esperar un año más de lo planeado; sin embargo, eso quiere decir que la próxima cita olímpica está más cerca que nunca. Paris 2024 será la próxima edición de los Juegos Olímpicos y ya comienza la cuenta regresiva para que el día 26 de julio de 2024 se vuelva a prender la llama en el pebetero.