Juan Pablo Ficovich dialogó con Deporte Argentino Plus tras el gran desempeño que realizó en el Challenger de Buenos Aires. Crónica de una semana y un año inolvidables.
Por Ezequiel P. Pernica (Agencia VEIEM 360) para DAP
El juvenil, una de las promesas del tenis argentino (Ahora 325 del ranking mundial), tuvo una semana muy distinta a todas las demás. No solamente alcanzó los cuartos de final en este Challenger de Buenos Aires, sino que disputó dos de los partidos más emocionantes del certamen: su triunfo ante el campeón panamericano Joao Menezes y luego su derrota ante Leo Mayer, a tres sets con tie break incluído. Sin duda una de las mejores semanas para «Juampi», quién logró romper la barrera de los octavos de final en éste 2019 si de Challengers se habla.
Un gran 2019 que tiene su apogeo en Buenos Aires
Oscilando entre el mundo de los Futures (Ahora pasó a llamarse ITF Pro Tennis Tour), en mayo llegaría la primera alegría de Juampi imponiéndose en el M15 de Brcko – más precisamente en Bosnia y Herzegovina- ante el australiano Christopher O’ Connell en la final. Un mes después, alcanzaría otro título en el M15 de Sao José do Rio Preto, luego de ganarle al local Rafael Matos. Una semana más tarde, repetiría en suelo brasileño en el M15 de Curitiba, ante otro local, Joao Pedro Sorgi.
En Buenos Aires, Ficovich llegaría a las dos finales de la ITF Tennis Tour, ex categoría Future. Primero se alzaría con el M25 de BA frente a su compatriota Francisco Cerúndulo y luego caería en el M15 frente a otro argentino, Genaro Alberto Olivieri. Ya en agosto, el chileno Marcelo Barrios Vera no le permitiría llevarse el trofeo en el M25 de Portoviejo, Ecuador.
En la categoría Challenger, alcanzaría los octavos de final durante en Punta del Este (Cayó con el boliviano Hugo Dellien), y en Italia donde perdió con el alemán Oscar Ottee en Roma y en L’Aquila con el germano Hohannes Haertels.
Un Challenger para no olvidar
Al no ser preclasificado debido a su actual ranking (352 antes del torneo), el de 21 años tuvo que pasar por el trámite necesario de la primera ronda, en donde se estrenó con una victoria contundente ante el brasileño Orlando Luz por 6-2 y 7-6 (6).
Luego, llegaría su máximo triunfo del torneo en lo que sin duda fue uno de los mejores partidos del certamen. Le tocaba una parada difícil ante otro brasileño y además campeón panamericano de los últimos juegos continentales, Joao Menezes. En el primer set cayó por 2-6, pero luego logró imponerse en la segunda y tercer manga por 7-5.
«Fue increíble», admite. «Iba 1-4 en el tercero, doble quiebre abajo y ayudó la gente, entre ellos, mis amigos. Eso me ayudó mucho, de repente empecé a jugar bien yo y mi rival empezó a errar y eso hizo que me vuelva a meter en el partido. Era un rival complicado, siempre estuve abajo y esa victoria da confianza para lo que viene».
Con amigos, siempre es mejor
En octavos de final le tocaba su compatriota Camilo Hugo Carabelli, al cual le ganó por doble 6-4 para acceder a cuartos de final, en donde sus amigos vienen haciéndole el aguante cada vez que le toca jugar en casa, por más complicados de asistir sean sus partidos en horarios de oficina: «Son mis amigos», explica, «parece que no laburan y no hacen nada (risas) pero ayuda mucho y te motiva más, los veo a ellos y a mi familia siempre son un aliciente para jugar. Son cábala, tienen que venir todos los días. Uno no está acostumbrado a jugar con la familia y los amigos»
Y fue justamente esa hinchada la que lo impulsó a dar lo mejor de si y a poder pelearle de igual a igual a un gigante como Leo Mayer. En el primer set, el bonaerense no pudo con toda la categoría del «Yacaré», aunque en la segunda parte (y con el apoyo de sus amigos) llegó a ponerse 7-6 (3) para llevar el partido a un set definitivo que finalmente se decantó para el sembrado número tres del torneo y ex campeón de Copa Davis: 6-7 (5), incluida alguna polémica debido a que la intensidad de «la hinchada de Juampi» que llegó a despertar algunas quejas de su rival.
No obstante, no existe nada que reprocharle a éste joven de 21 años que encontró en su propia ciudad, la motivación necesaria para dar lo mejor de si en una de las mejores semanas del año para él y para el tenis argentino, ya que no se trata de cualquier torneo, sino del tercer torneo más importante del que dispone nuestro país, en donde muchos tenistas como él, tienen una oportunidad que muy pocas veces se presenta, jugar en casa: Lo disfruto mucho. No estamos acostumbrados porque no tenemos muchos torneos acá. Yo vengo de ganar un par de Futures. Lo importante es lo que sucede dentro de la cancha y trato de jugar bien , correr y competir. Por ahora me está yendo bien y espero poder seguir así…
– Se viene notando un ambiente distinto por ser un Challenger…
– Es increíble el torneo. El año pasado no había tanta gente, jugás un lunes o un martes a las 12 del mediodía y ya hay mucho público, eso está bueno porque te da mas ganas de jugar, te motiva mas. Hay que felicitar a Torneos, a (Mariano) Ink y a la gente que trabaja porque tiene categoría ATP.